Retomo las crónicas de las marchas o carreras a las que he ido, que llevo un poco atrasado este tema, como podéis ver, y os cuento cómo me fue en la Marcha en BTT «Camino de Loriana» de Montijo, que fue hace ya un tiempecillo (23 de marzo), el domingo después de la marcha de Hornachos, que ya os conté.
Esta prueba no estaba dentro de mis objetivos de la temporada y he de reconocer que fui para acompañar a mi amigo Luis Ignacio, que me llamó durante esa semana para pedirme que fuera, para darle impulso a la carrera y que vaya ganando participación cada año.
De todas maneras, pese a ser una carrera en sí misma, no la preparé como tal y el día antes estuve entrando un gran fondo (140kms) con la bici de carretera con subidas a Montánchez, con lo que en el momento de iniciar la marcha no tenía las piernas en muy buenas condiciones.
Y así fue, que cuando se dio la salida lanzada, Luis Ignacio atacó nada más oír el silbato y nunca más le vimos. Por detrás, a pesar de mi «dolor de patas» intenté engancharme a algún grupo cabecero, aunque me costaba mucho seguirles, formándose un grupito de 6-7 por delante y yo tirando del segundo grupo, con la idea de no perder demasiado tiempo e intentar recuperar terreno más adelante, cuando ya haya calentado algo. También porque me dijeron que el recorrido era prácticamente plano y con buenos caminos y pistas.
Así fue, toda la carrera rondando el top 10, tirando del grupo, alcanzando a alguno, viendo cómo se iban otros, hasta que, cuando calculo que voy en el puesto 10 o así, llegamos, tras una bonita vereda entre encinas y jaras, a un tramo de barro muy blando, seguido de ese mismo barro, ya seco y duro y pisado por vacas, donde mi menor técnica hizo que sufriese demasiado. Un pequeño repecho (corto pero muy duro) que lo seguía consiguió que cejara mi empeño por hacer un buen puesto y decidí levantar el pie. Quedaban unos 20 -25 kms para meta, pero mi cuerpo (más bien mi mente) no daba para más.
Desde ahí, de paseo hasta meta. Viendo cómo me pasaban unos y otros sin hacer el menor intento por seguir su rueda. Sólo a Raul Gregori, que por entonces volvía a montar tras unos meses de parón por lesión, le hice unos kilómetros para echarle una mano, pero poco más. Hice la subida a meta muy tranquilo (hasta posando para la foto) y al final, puesto 25.
Felicitar a los ganadores, Luis Ignacio Barril en la categoría masculina y Cristina Barrado en féminas. Espero volver el año que viene en mejores condiciones.