La canción del finde (116) | Vetusta Morla – Consejo de Sabios

Tengo que reconocer que me llevé una pequeña decepción tras una primera escucha del nuevo disco de Vetusta Morla (Mismo sitio, distinto lugar). El single «Te lo digo a ti» no me hizo mucha gracia, algunas incluso me parecían que tenían ritmos de canción del verano, como «La Vieja Escuela» y después de escuchar el disco entero sólo podía rescatar un par de canciones. Pero qué canciones. Una de ellas, quizá una de las mejores que he escuchado, es este «Consejo de sabios». Desde aquí hago un llamamiento: por favor, no puedo dejar de escucharla. La podría poner en bucle… y no me cansa. Es tremenda. Un himno. Ya os lo digo, directa a lo mejor de la música en español:


La letra:

Antes de hacerlo estallar,

quiero que aguantes mi mano.

Dime si el pulso es constante

o es un murmullo lejano.

No arrastro nada esta vez,

traigo el carrete velado.

Es pronto para la amnesia

y tarde para irnos intactos.

¿Qué hay que hacer?

¿Qué hay que hacer ahora que todo está hablado?

Lo intenté, lo intenté.

Hoy tu recuerdo es un pájaro,

que bate sus alas detrás de mí

y guarda en su pico tus labios.

Tienes la forma precisa,

guardas la herencia del mármol.

Fuiste la Venus de Milo

y yo puse el mundo en tus brazos.

Y rodé,

Y rodé como resbalan los años.

Lo intenté, lo intenté.

Hoy tu silueta es un pájaro

que bate sus alas detrás de mí,

me silba y enreda mis pasos.

Reunid otra vez al consejo de sabios.

Ponedme una vela, estoy atrapado.

Sácame del corredor

cuando caiga el santuario.

Sácame de este fortín,

llévame en tu vuelo raso.

Quiero un punto ciego,

quiero tu arrebato.

Llévame contigo, llévame sin pactos.

Y llévame al puente que no explotó,

al muro que crece en mi mano,

el mismo que impide tus pasos.

Caerán los imperios, caerán los estadios,

pero antes tendrán que caer nuestros santos.